Sabemos que tienes que hacer mil cosas todos los días, por lo que puede ser difícil saber de qué manera ahorrar dinero en el hogar. Por ello, en Finerio hemos hecho una selección de los consejos más prácticos para reducir tus gastos en las áreas del hogar que, probablemente, se llevan gran parte de tu dinero: comida, renta, electricidad, agua y gas.
Alimentos
1. Compra solo lo necesario. No llenes tu refri de alimentos que no te vas a comer. En todo el mundo, aproximadamente, el 30% de la comida se desperdicia, lo que significa tirar dinero a la basura. Así que toma en cuenta las raciones exactas de lo que comerás en la semana.
2. Compara precios de artículos para el hogar. En el portal de la Profeco, “Quién es quién de los precios”, puedes comparar los costos de los artículos en diferentes establecimientos. Si puedes, compra al mayoreo o por paquetes de productos no perecederos, te ahorrarán hasta un 30%.
3. Cambia de marca. En la Revista del Consumidor puedes comparar la calidad de diferentes marcas y productos. Podrás observar la marca genérica o propia de una tienda no es tan diferente.
4. Almacena correctamente tu comida. ¿Cuántas veces no te ha pasado que se echa a perder el cilantro o la carne? ¿Cómo se acomoda la comida en el refrigerador?:
- Repisa 1 (la de hasta arriba o cajón chico). Carnes frías y queso.
- Repisa 2. Lácteos y huevos. De preferencia, aquí y hasta el fondo, pon la leche para que te dure más.
- Repisa 3. Carnes crudas, que vas a cocinar, si no, mételas al congelador.
- Cajones de hasta abajo: Frutas y verduras
- Puerta: Aderezos y condimentos.
Por otra parte, si no te da tiempo de preparar las frutas o las verduras cada día y se echan a perder; mejor lávalas y córtalas en una tarde y guárdalas de preferencia en recipientes de vidrio.
Vivienda
5. Comparte casa o departamento. Si vives con roomies puedes ahorrar del 30% al 70% en los gastos de servicios públicos y renta. Increíble, ¿cierto? Busca un habitación en el sitio de Dadaroom, Comparto Depa, Metros Cúbicos o Roomies DF (en Facebook).
Antes de hacerlo y para que funcione, asegúrate de que todos tengan un ingreso suficiente, determinen el porcentaje de renta y servicios que pagará cada quien, y quién será el responsable de realizar los pagos.
6. Renta un cuarto. Si en tu casa o departamento tienes un cuarto vacío, considera rentarlo para obtener ganancias; estas podrían ayudarte a pagar un gran porcentaje de tu renta o de la mensualidad de tu crédito hipotecario. Ahora es muy fácil hacerlo con páginas de internet como las que mencionamos anteriormente, también con Airbnb.
7. Múdate a una zona menos cara. Si rentas una vivienda, te recomendamos que busques opciones más accesibles en tu localidad. Ten paciencia para encontrar un lugar más barato, que además te proporcione ventajas como más espacio o mayor cercanía a tu lugar de trabajo.
Agua
8. Enjuaga los platos al mismo tiempo. Enjabona varios de ellos, puedes juntarlos en una bandeja adicional para luego enjuagarlos.
9. Modera el tiempo que tardas en bañarte. De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), una ducha debería durar menos de 5 minutos para no sobrepasar los 100 litros de agua.
10. Repara fugas. Cuando el recibo de agua es alto, muchas veces se trata de fugas. Repáralas y verás cómo se reduce el monto que debes pagar.
11. Reutiliza el agua. Considera reutilizar el agua para lavar tu auto o el patio. Puedes poner una cubeta en la regadera mientras esperas a que se caliente el agua; cuando saques el último enjuague de tu lavadora, puedes guardar esa agua y reciclarla.
Energía eléctrica
12. Reduce el uso de la luz. En México, aproximadamente el 15% de nuestro gasto de electricidad es desperdiciado por dejar conectados los aparatos electrónicos al dormir o salir de casa. Apaga la luz y los aparatos eléctricos cuando no los uses. Puedes apoyarte en dispositivos inteligentes, como Swich Off, que desconecta automáticamente tus aparatos cuando no están en uso.
13. Mantén tarifa intermedia. En nuestro país, parte del costo de la energía es subsidiada. Dependiendo de la cantidad que consumes por mes (kWh), tienes un precio básico para los primeros KWh, un precio Intermedio (puede ser intermedio bajo e intermedio alto) para el segundo bloque y un precio excedente para el resto. Los límites y precios dependen de tu localidad y de la época del año.
Debes tratar de no consumir más allá del precio intermedio, ya que puede ser sujeto al pago sin subsidios (Tarifa Doméstica de Alto Consumo o Tarifa DAC), el precio excedente puede llegar a ser hasta CINCO veces más alto.
14. Calefacción o aire acondicionado. Los expertos recomiendan encender la calefacción por la mañana y apagarla por la noche, manteniendo una temperatura ideal de entre 20 y 21 grados centígrados y entre 15 y 16 grados durante la noche. Reduciendo la temperatura en la vivienda se consigue un ahorro en torno al 13%. Cuando estés fuera de casa apaga la calefacción.
En verano o en zonas cálidas, procura poner el termostato en 26 grados y usa ropa ligera. El 85% de las personas lo deja entre los 20 y los 21 grados. Para ello, debes saber que la diferencia máxima entre la temperatura que haya en el exterior y en el interior debe ser de 12 grados. Cada grado de diferencia que pongas, consumirás un 8% más de energía.
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15. Usa focos ahorradores. Cambia por ejemplo, los focos incandescentes como por ejemplo los de luz LED.
16. Utiliza la lavadora a máxima carga. Así reduces el número de veces que lavas ropa.
17. Limpia tu refri. Si tu refrigerador tiene sus años, no dejes que se acumule hielo en el congelador, ya que consume mucho más energía que uno limpio.
18. Paga los servicios como agua y energía eléctrica. En México, vas acumulando cargos por cada mes que no pagas algún servicio. Esto puede hacer que tengas que pagar hasta el doble del monto inicial. Además, pueden dejarte sin servicio aviso hasta que pagues el monto total; ya pagado, pueden tardar días en restablecerlo.
Gas
19. Elección de calentador de agua: A la hora de adquirir un calentador de agua (boiler), calefactor, estufa, caldera o cualquier otro aparato que funcione con gas, ten en cuenta dos cosas: que no sea demasiado grande para tus necesidades y que haga uso eficiente de la energía.
20. Uso del calentador de agua. Procura mantener el regulador de tu calentador de agua (boiler) en un nivel medio y si puedes apagado; solo utiliza el nivel caliente o alto cuando lo necesites.
21. Estufa. No dejes prendida la estufa cuando no la estés utilizando.
22. Cocina con ollas de presión. Las cacerolas con tapas, ollas a presión y ollas de fondos planos permiten ahorrar entre un 25 y 50% de gas, ya que reducen el tiempo de cocción.
23. Cerciórate de que recibes el gas que pagas. En México es una práctica común que los proveedores de gas den mucho menos. Si es el caso, considera cambiar de proveedor.
24. Repara fugas. Llama a un técnico para que revise que no haya fugas en las tuberías de gas o de agua caliente.
25. Compra un calentador solar. Si está dentro de tus posibilidades, considera adquirir un calentador solar de agua. Debido a las condiciones climáticas de México es muy funcional y será una inversión con la que, a largo plazo, ahorrarás bastante dinero. Solo fíjate en contratar a un proveedor prestigioso.
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*Artículo originalmente publicado en el blog de Finerio.