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Una excelente manera de obtener efectivo rápido es un préstamo personal. Ya sea para pagar una boda, la educación de un niño, una emergencia médica, un viaje o cualquier otro proyecto, los préstamos personales son una línea de crédito que te permite satisfacer necesidades casi de manera inmediata.
Estos préstamos personales no requieren garantías y son bastante fáciles de obtener. Algunas instituciones ofrecen aprobación instantánea y te permiten disponer del crédito en solo 24 horas. Con una documentación mínima e incluso desde una computadora puedes solicitarlo sin salir de casa.
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En resumen, un préstamo personal puede ayudarte para cualquier necesidad financiera y con menor costo que una tarjeta de crédito, pues hay alternativas con menores tasas de interés.
Entonces, ¿cómo se elige el mejor préstamo personal? La tarea más importante que debes hacer antes de contratar un préstamo es informarte y comparar para elegir el que más te convenga. Y aunque la oferta es amplia, hay formas de reducir la lista. Aquí te compartimos cuatro factores a los que debes poner atención, para que puedas estar seguro de elegir la mejor opción.
1. Busca una institución seria pero sencilla en su operación
Cuando compares entre créditos, fíjate en las instituciones con criterios de elegibilidad simples y fáciles de cumplir. Esto aumenta tus posibilidades para obtener el crédito y acelera el proceso de verificación y aprobación.
¡Pero cuidado! Evita a toda costa las empresas que no toman en cuenta tu score de crédito para el otorgamiento, pues significa que pagarás intereses altísimos. Ninguna institución financiera seria otorga créditos sin evaluar el riesgo de sus clientes.
En kubo.financiero, por ejemplo, tu score es lo que nos da la pauta para asignarte la tasa de interés. Así, los mejores pagadores obtienen tasas preferenciales, es decir, créditos más baratos.
2. Verifica y compara la tasa de interés
Es un aspecto vital a considerar cuando se busca el mejor préstamo personal. Afecta directamente la cantidad final que pagarás por el crédito. A menor tasa es un crédito más barato.
Generalmente, las personas con una puntuación más alta el Buró de Crédito se consideran mejores pagadores y se les otorgan tasas menores. Si tu puntuación es inferior a la media, es probable que las instituciones te ofrezcan una tasa mayor.
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3. Evalúa las comisiones
Antes de contratar un préstamo, es importante que compares también las comisiones.
No contrates una opción basándote simplemente en una tasa de interés baja. Considera factores como la comisión por apertura, intereses moratorios, seguros e incluso pregunta si hay penalización por pagos anticipados.
El Costo Anual Total o CAT, es una referencia para comparar los costos entre diferentes créditos.
4. Garantiza la flexibilidad de pago
Para tener la mejor experiencia con un préstamo, asegúrate de que la institución financiera tiene diversos plazos de pago para que puedes elegir el que se ajusta a tu flujo de efectivo. Esto te permitirá pagar puntualmente tu crédito y así las posibilidades de incumplimiento.
5. Usa herramientas para comparar
Los comparadores en línea son herramientas que te permiten conocer la oferta crediticia en un clic. No solo eso, algunos te dan beneficios adicionales. Por ejemplo, Mejores Préstamos te arroja tu score de crédito y te muestra las instituciones donde tu solicitud tiene mayor posibilidad de ser aprobada.
Los puntos anteriores te ayudarán a obtener el mejor préstamo personal para tu perfil financiero. Recuerda que el crédito es la herramienta financiera perfecta para ayudarte a cumplir con metas y proyectos, el secreto está en contratar el correcto.